sábado, 21 de noviembre de 2009

Diario de Spandau

Terminada la lectura de Diario de Spandau de Albert Speer.
Es uno de los pocos libros de Memorias cuya lectura no voy a repetir pero su lectura ha sido una experiencia vital muy interesante(¡Bueno! Quizá el calificativo de "vital" sea excesivo pero...dejémoslo estar). Se trata de los diarios de un hombre encerrado en un fortín durante veinte años. Speer ha sabido organizar su vida de tal forma que el encierro no atente contra su equilibrio sicológico. La lectura será una de las actividades que le ayude a ello de manera importante. Con sus pequeñas anotaciones que debía de sacar de forma clandestina del fortín este escritor alemán nos aproxima a personajes tan tan fundamentales del regimen nazi como lo fue Rudolf Hess.
La última anotación del libro termina con un comentario que hace Hess ante la llegada de la nueva remesa de carbón que van descargando en el patio ante la vista de los tres últimos presidiarios Speer, Schirac y Hess. Hess, mirando como se desprende la carga de carbón dice:
-¡Cuanto carbón...! Y a partir de ahora, para mí solo...
Efectivamente, ese mismo día abandonaron Spandau Schirack y Speer y quedaría solo, hasta su fallecimiento, Rudolf Hess.

jueves, 19 de noviembre de 2009

Confesiones de un burgués

Leidos los dos volúmenes de Memorias del escritor hungaro Sandor Marai. El primer volumen: Confesiones de un burgués comienzan con la descripción lírica y con buena prosa de su infancia en el pueblo natal. Hijo de un fiscal del Estado, pronto se inclina por el periodismo.
El segundo volumen ¡TIERRA TIERRA! nos narra la ocupación nazi de Budapest con la consiguiente expulsión de éstos y la entrada de las tropas soviéticas. Sandor Marai decide marchar fuera de Europa. Con ochenta y nueve años pone fin a su vida cuando residía en los Estados Unidos.